viernes, 23 de julio de 2010

EL COCHE QUE FUNCIONABA CON RISAS

El papá y la mamá de Mario, decidieron que en un dia tan soleado tenían que ir a jugar con Mario al parque.
En cuanto llegaron, Mario encontró una caja de cartón y empezó a darle vueltas y a jugar, pero el solo se aburría - esto solo es un trozo de cartón, vaya rollo

Entonces 2 niños que estaban jugando en el parque se acercaron y creyeron que sería divertido hacer un coche que funcionara con espinacas.

- ¿Y como lo haremos correr si no tenemos espinacas? - preguntó Lucas.
- Ya lo tengo, funcionará con arena - dijo Irene - pero tampoco les pareció buena idea.

No sabian en que convertir esa caja, y pensaron, que con un poco de magia, algo apareceria.

Los tres niños cogieron una ramita del suelo y cerrando los ojos fuerte dijeron las palabras mágicas: Abra cadabra, que la magia convierta ahora esta caja.

Al abrir los ojos, vieron que la caja era ahora un gran coche azul con unas luces naranja. Pero no sabian como funcionaba, probaron dandole cuerda, gritandole, arrastrandolo, pero no ocurria nada.
Entonces empezaron a tener ideas cada vez mas alocadas. Tanto que empezaron a reirse a carcajadas. ¡Y caramba! el coche salió corriendo.

- ¡Pues claro! El coche fnciona con risas - dijo Mario

Ellos gritaban - ¡Funciona, funciona, este coche funciona con risas! Los demás niños del parque se sorprendieron y les seguian porque también querían subirse a ese coche tan extraño. Como no conseguían alcanzarlos, Mario, Irene y Lucas se reian más y más alto, y el coche, al escuchar las risas iba más y más deprisa. Y así pasaron la tarde en el parque, jugando y riendo.

Mientras volvían a casa, Mario se dió cuenta, sin sus nuevos amigos, Irene y Lucas, y los otros niños del parque no se habría divertido tanto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario