viernes, 29 de abril de 2011

¿QUE LE PASA A LETICIA?

Mario andaba unos días preocupado, tenía una amiga en el colegio, Leticia, que estaba un poco triste.
Cada vez que se acordaba de ella, se ponía triste porque no le gustaba que sus amigos se sintieran mal. Así que fue a visitar a Lita, su amiga hormiguita, y a contarle lo ocurrido.

- Mario, ¿porque crees que está triste tu amiga Leticia? - le preguntó Lita

- Yo pienso que ella cree que le va mal en el colegio, pero yo creo que ella aprende bastante - respondió el niño.

- ¿Entonces, porque no se lo dices? - replico la hormiga

- Sí se lo digo, pero creo que le pasa otra cosa - explicó Mario - creo que no soy bastante bueno para ayudarla.

La hormiguita Litase quedó pensando un rato como podía su amigo humano ayudar a Leticia. ¡Y por fin tuvo la respuesta!

- Mario, solo tienes que apoyar a tu amiga, reírte con ella, y cuando ella tenga el valor para decirte lo que le pasa, entonces lo hará y seguro que sabrás como ayudarla.

- ¡Pues claro! no es que no sepa ayudarla, es que todo necesita su tiempo, y cuando ella mi quiera, estaré con ella!

viernes, 22 de abril de 2011

LA ORUGA POTUGA SE ENCIERRA

Lita y Mario andaban, como casi todas las tardes, dando un paseo y descubriendo nuevos mundos felices en el parque.
De repente Mario se quedó petrificado, mirando fijamente hacia una ramita de un arbol y con un semblante muy muy triste.

- ¡Mira Lita! - gritó - pobre oruga, se va a quedar encerrada!

Pero cuando Lita llegó, la oruga les miró sonriente y les dijo:

- Hola amiguitos, mi nombre es Potuga, y estoy feliz porque ya estoy haciendo mi capullo

La oruga Potuga siguió atareada tejiendo y tejiendo mientras tarareaba una canción. Mario miró a la hormiguita un tanto extrañado, y Lita, le devolvió la mirada sonriendo.

- ¿Es que no lo entiendes Mario? - preguntó la hormiga
- Pues no, ¿porque esta tan feliz si se va a quedar encerrada ella misma en ese cascarón? - resplicó el niño
- Mario - explicó Lita - lo que tu ves como una cárcel, como un final para la oruga, es en realidad un nuevo inicio, la oruga volverá renovada y mucho más hermosa.

El niño se quedó un rato pensándolo, pero seguía sin comprender. Lita, que se daba cuenta de que no se lo creía del todo le propuso volver en unos días a ver a la oruga Potuga.

Y así lo hicieron, cuando llegaron a la ramita del árbol, el capullo se estaba abriendo, y Mario vió salir de allí una hermosa mariposa de colores vivos y alas revoloteantes.

- ¡Potuga! ¡Potuga! ¿donde estas? - llamaba Mario
- Aqui estoy amigo - respondió la mariposa

Mario, se quedó sorprendido,y entonces comprendió, lo que parecía el final de la oruga era en realidad un cambio, un tiempo de reposo y de tranquilidad para poder volver convertida en una mariposa, que ahora podía revolotear entre las flores, se habia reinventado, se había convertido en algo más hermoso.

viernes, 15 de abril de 2011

LA GRACIA DE LAS HORMIGAS

Estaba un dia Lita arreglando su laberinto cuando Mario le dijo:

- Lita, no se porque te afanas tanto en arreglar tu laberinto, si mañana estará igual de sucio, además, los humanos piensan que las hormigas sois solo bichos feos y sucios que no servís para nada.

- No señor, porque los humanos digan cosas que muchos de ellos ignoran, no quiere decir que es así-replicaba lita - Pero algunos se han preocupado de estudiarnos y seguirnos y han visto que somos seres muy resistentes gracias a nuestra perseverancia.

- Pero algunos piensan que no tenéis gracia

- La "gracia" es la cualidad que cada ser da a quien cree merecerlo, pero en realidad, desde el mas pequeño hasta el más grande, todos tenemos nuestra gracia, que es vivir para llegar a nuestro destino, para luchar y aprender día a día. Ten por seguro que nosotras, las hormigas, poseemos el valor de la voluntad y el tesón.

viernes, 8 de abril de 2011

EL PAÍS MÁS FELIZ DEL MUNDO

Lita y Mario pasaban la tarde jugando en el salón de la casa. De repente Lita preguntó a su amigo:

- ¿Como te imaginas el país más feliz del mundo?

A lo que Mario respondió:

- Pues no lo sé, pero podemos salir a buscarlo

Entonces los dos amigos salieron al jardín, y empezaron a buscar. Se encontraron con unas flores de colores vivos con un aroma muy peculiar y agradable, tanto que se quedaron un rato disfrutando de ellas. Siguieron su camino y vieron un escarabajo payaso que les hacía sonreír, pero pensaron que debía haber algo que los hiciera más felices todavía. En su búsqueda vieron una telaraña que formaba un castillos alucinante, pero no se cesaron su objetivo y siguieron buscando. Más adelante encontraron unos pájaros azules que cantaban. Ellos intentaron imitar su canto y aunque no conseguían hacerlo tan bien, lo pasaron muy bien intentándolo.

Entonces encontraron a la abeja Taleja posada sobre un trébol, que los había observado reír durante toda la tarde.

- ¿Que estáis buscando? - preguntó Taleja

- Buscamos el País más feliz del Mundo - respondió Mario

- ¿Y de verdad aun no lo habéis encontrado? - les recriminó la abeja - El país más feliz del mundo está tan cerca de vosotros que lo habéis visto y no os habéis dado cuenta.

Los dos amigos se miraron fijamente sin poder entender lo que Taleja les estaba diciendo. De repente Lita empezó a reír.

- Claro! - exclamó la hormiguita - Mario, el país más feliz del mundo es en el que estamos viviendo esta tarde. Es el país que genera esa ilusión por mirar y disfrutar de sus flores y todo lo que nos entusiasma, incluso de los cantos de pájaros que no sabemos imitar.

Entonces los dos amigos comprendieron que hacía rato que estaban en el País más feliz del mundo y siguieron explorándolo con entusiasmo.

viernes, 1 de abril de 2011

LA MUDANZA DE LITA

Lita habia decidido cambiarse de casa, no se iba muy lejos, pero a un laberinto por explorar con nuevas galerías.

Para esa nueva casa tenía mucho que hacer, cambiar sus ropas, sus palitos, su cámara de fotos y todo aquello que durante un largo tiempo había recolectado (palitos, hojas, frutas, piedras...). Tanto se esforzaba por tenerlo todo a punto y darle una sorpresa a su amigo humano, que trabajaba sin parar y sin visitar a su amigo Mario.

Por fin el día de la mudanza había llegado, para celebrarlo, preparó un brebaje con una mesa linda con flores y una tarta de arándanos, para invitar a su amigo Mario y a todos los demás bichos compañeros que había conseguido en sus aventuras (Pinturela, Saltamontelín, Chiflín, Camaña...). Como faltaba tanto un rato hasta la hora de la merienda, decidió sentarse en su nuevo sofá a descansar.
De todo lo que había trabajado durante días, estaba exhausta y se quedó dormida, tanto que cuando Mario y los demás llegaron no pudieron despertala. Estuvo durmiendo casi un día entero y cuando despertó todos estaban allí esperándola.

- Lita, has trabajado mucho - dijo Mario
- Quería que todo quedara perfecto - respondió ella
- Sí, pero no era necesario que lo hicieras tu sola, tienes a tus amigos para ayudarte - replicó Mario.

Entonces Lita aprendió la lección, tanto se había esforzado ella sola para hacer las cosas que se olvidó de descansar y disfrutar de la ayuda de sus amigos, y se había perdido esa merienda que estaba deseando celebrar con sus amigos. Después de todo, lo más importante es compartir con los que más quieres lo mejor de ti mismo.

Desde aquel dia Lita siguió siendo tan hacendosa, pero eso sí, ahora era más feliz, puesto que aprendió que llevar las cargas tiene sentido, si nos queda tiempo para disfrutar y amar.